Este martes se conocieron las pericias del accidente ocurrido el sábado pasado en la ruta 51 que involucró a un BMW modelo 2020. En el hecho, murió Edgar Barte de 53 años que iba de acompañante, mientras que el conductor se encuentra internado en terapia intensiva.
Según se pudo saber, el BMW circulaba al menos a 220 km/h. Estimaciones que sugieren que podría haber ido aún más rápido, posiblemente a 230 km/h.
El accidente se produjo cuando el neumático delantero izquierdo del vehículo estalló. El conductor, en un intento por mantener el control, realizó varias maniobras desesperadas, pero sin éxito. Tras recorrer unos 200 metros tratando de estabilizar el auto, finalmente perdió el control, mordió la banquina y volcó, dando tumbos durante más de 140 metros.
El BMW terminó completamente destruido, con dos ruedas y cubiertas desprendidas, a más de 50 metros de la banquina.
A pesar de que ambos ocupantes llevaban el cinturón de seguridad, Barte sufrió un golpe fatal en la cabeza contra uno de los parantes del auto. El conductor, por su parte, resultó gravemente herido con múltiples fracturas, incluyendo costillas y muñecas, además de una perforación pulmonar. Su estado es crítico, pero su vida no corre peligro inmediato gracias a la ausencia de traumatismos craneales o cervicales severos.
La Fiscalía anunció que, si el conductor sobrevive, se le imputarán cargos por homicidio culposo y manejo temerario. Este último término se refiere a la conducción peligrosa y negligente, con un claro exceso de velocidad muy por encima del límite legal de 110 km/h en la ruta 51. La investigación también se centrará en las condiciones del vehículo, particularmente en el estado de las cubiertas, que se consideran un factor crucial en el accidente.
La Dirección de Tránsito de la Policía neuquina está recopilando todos los datos y peritajes necesarios para completar el informe final, que será fundamental para avanzar en la acusación legal contra el conductor.